Si bien sabemos que una sala de Tarot no es el ámbito para consultas sobre salud, ya que los tarotistas no somos médicos, los arcanos pueden brindar una orientación para dejar más tranquila a la persona o confirmarle que puede haber una dolencia que requiera la visita a un profesional de la medicina, pero en lo personal prefiero no habilitar este tipo de consultas.
El Tarot es una herramienta que, bien aplicada, sirve para mejorar aspectos, para tomar consciencia sobre actitudes nocivas que nos estén perjudicando en la relación con los demás y con nosotros mismos, y para marcar una saludable distancia de las preocupaciones, si las tenemos, que nos permita tomar mejores decisiones. Entonces, suelo recomendar que si existen síntomas o sospechas de alguna dolencia, es mejor acudir al consultorio de un médico antes que al de una tarotista. De esa forma se toma el toro por las astas, no se dilatan tiempos y, en el mejor de los casos, no se alientan temores infundados.