Cuando el origen es el Vacío, no hay dirección ni propósito.

Es a través de la Creación que éste se manifiesta, primero, como un deseo.

El propósito es la experiencia misma.

¿Quién experimenta? La Creación (a través de ti).

¿Qué es la Creación? Una Intención del Vacío.

Por eso decimos que nada en tu experiencia está por fuera del propósito.

No te tomes tan en serio.

No le busques sentido a lo que hagas, puesto que respondes a patrones inconscientes y es seguro que lo tendrá.

No eres, por esto, marioneta del destino ni peregrino perdido.

Estás en tus calzas transitando tu senda, y no hay tela mundana que te haga vivir experiencias que no te correspondan.

Es tu vida la que has asumido al encarnar.

Es tu compromiso con la Vida lo que te mantiene aquí.

No lo razones todo con ojo crítico.

Entonces, ¿En dónde poner tu atención? En la Luz que te guía más allá de toda duda.

Déjate inspirar por aquello por lo que puedas sentirte agradecido.

Y luego, haz lo que quieras.

Imagen: El Loco, Tarot de Marsella.